lunes, 5 de septiembre de 2016

Cortes abiertas

Por Álvaro Caballero (publicado en Diario de León, en "La Liebre" el 24.04.2016 -http://www.diariodeleon.es/noticias/opinion/cortes-abiertas_1063969.html)

Como no hemos ido tampoco esta vez a Villalar, que mira que ponemos empeño cada 23 de abril pero al final el GPS del inconsciente acaba por llevarnos el coche al Ikea de Asturias, la Junta nos va a meter este año la campa en casa. El parlamento autonómico tomará el próximo 4 de mayo el claustro de la Colegiata de San Isidoro para celebrar un pleno, con toda la pompa y el boato. Un homenaje de suplantación con sus Cortes a aquellas otras de 1188, cuando éramos un reino respetado y no la única región histórica sin comunidad, en las que Alfonso IX, en el mismo marco, convocó por primera vez en la historia al pueblo para que se sentara junto a la nobleza y el clero, aunque sólo fueran convidados los incipientes burgueses cuya bolsa necesitaba el monarca para financiar sus guerras. Ahora, más de ocho siglos después, nos van a mecer la «Cuna del parlamentarismo» con la misma mano que nos han apretado el cuello en los últimos 33 años para que tengamos claro cuál es la cuna que nos arrolló.

La idea incide en el propósito de crear identidad y sentimiento de región, con decenas de millones de euros invertidos en balde por la Junta en las tres últimas décadas, como si fuéramos los cataríes a los que el emir pagaba en el último Mundial de balonmano para que animasen a cada una de las selecciones. No importa que León haya perdido en este tiempo 42.036 habitantes mientras Valladolid ganaba a su vez 43.484 vecinos. Da igual que se haya estimulado el desembarco de empresas en Boecillo y se haya abandonado de manera deliberada la provincia leonesa como un parque temático turístico para señoritos. No tiene interés que los fondos Objetivo 1 de la UE y los Miner que tenían como destino el desarrollo de las zonas desfavorecidas se utilizaran para enmascarar inversiones en el triángulo castellano de Valladolid, Burgos y Palencia. Se trata de una bobada que en los libros de Educación se adoctrine con la existencia de Castilla y León desde el hombre de Atapuerca y, por contra, no se estudie en ningún curso dónde fueron las primeras Cortes representativas del parlamentarismo moderno.

No podemos negar que resulta un detalle que la Junta traiga un pleno a donde fueron esas Cortes. Estaría bien que entrara el pueblo llano —mineros, agricultores, ganaderos, despedidos, padres cuyos hijos han tenido que emigrar a la fuerza— a decirles lo que piensa de esta su comunidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario