Por Ramiro Pinto de la Plataforma por la Recuperación del Valle de Riaño
Cuando grito ¡RIAÑO VIVE! sale del corazón si, pero hay un corazón colectivo que está dormido... sólo hay que despertarlo.
Creemos que soñamos cuando estamos dormidos, y en verdad los sueños viven cuando están despiertos.
Cuando hay un vencedor la conciencia del derrotado se duerme. Dormido cree que el vencedor tiene razón. Pero al despertar ve que le hizo vencedor su brutalidad, su falta de escrúpulos, entonces la conciencia, con los ojos abiertos y el alma a flor de piel, es capaz de vencer al vencedor, porque su victoria le dejó sin conciencia.
Sólo hay que despertar, abrir los ojos y mirar la vida, una vida que late en el pasado y sueña el futuro. La conciencia es solamente el presente, por eso tenemos miedo a que despierte, y muchas veces nos hacemos los dormidos, porque no queremos reconocer que amamos nuestra tierra, que es pasado, presente, futuro. Ese amor nos haría caminar al infinito, pero nos quedamos dormidos para no tener que recorrer nuestro propio interior al que tememos ver.
Un camino de mil kilómetros empieza por un simple paso. En Riaño ya los has dado, quedan los demás.
Riaño Vive porque late el corazón de la montaña, su historia, sus sueños, porque las montañas sueñan, no sólo nubes, sino personas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario