sábado, 29 de agosto de 2009

Progreso y libertad

Por Joaquín Cuevas Aller

Con los datos oficiales en la mano se puede a firmar que el progreso económico de España en las tres últimas décadas ha sido el más importante de toda su historia. Coincide, y no casualmente, que estas tres décadas han sido las de mayor libertad también de nuestra historia. Por eso, se puede sacar la conclusión de que progreso es sinónimo de libertad, tienen que ir juntas. Si echamos un vistazo al exterior, comprobaremos que los países del mundo más ricos son a su vez los que gozan de más libertad. Es algo natural, en los países libres los hombres se mueven libremente, exponen sus ideas, sus conocimientos y ambas cosas son aplicadas con entera libertad. En un mundo libre, los intereses generales son prioritarios a los intereses particulares o sectoriales. En un mundo libre, los gobernantes no piden confianza a los ciudadanos, sino que dan confianza a los ciudadanos con políticas prácticas y eficaces.

En los países libres, los derechos y libertades de los ciudadanos no son algo que conceden los gobiernos. En los países libres, los derechos y libertades de los ciudadanos son inherentes de por sí al ser humano. Donde no hay libertad, lo que se supone debieran ser derechos, no son más que privilegios para unos pocos en perjuicio de muchos. Todos los cronistas que confirman el gran progreso de España en estas tres últimas décadas, se olvidan de un dato importante. En estos últimos treinta años se han subido al carro de viajar más de un millón de parásitos que no hacen otra cosa más que cobrar un buen sueldo, ejerciendo de zampones profesionales. La creación del Estado de las autonomías es el principal causante de ese millón largo de parásitos. Imaginemos por un momento lo que hubiera progresado España sin las Autonomías, sin los parásitos.

Pero todavía hay un dato muy importante que nunca es contado ni analizado por los cronistas, es más, parece que interesa que no se sepa. Existe una región, llamada región leonesa que, no solamente no ha seguido el ritmo de las demás regiones, sino que ha retrocedido. La región leonesa ha sido la única región española que ha retrocedido en el desarrollo económico en los citados últimos treinta años. Ciñéndonos solamente a los datos comparativos medios de España con los de la provincia de León, encontramos los siguientes: mientras la población de España ha aumentado un 30%, la provincia de León ha perdido un 25%. El número de afiliados a la Seguridad Social ha aumentado en España en el citado período, un 50% (este dato es el más evidente del progreso de un país), en León, ha disminuído un 25%. Mientras en España han aumentado espectacularmente la mayor parte de las producciones industriales, ganaderas y agrícolas, en León han disminuído también espectacularmente todas esas producciones, superando en algunos casos el 35%. Todos estos datos son lógicos si los comparamos con los datos de la población activa: mientras en España han aumentado, en León, han disminuído y, además la mayor parte de ese tanto por ciento de disminución, se refiere a gente joven.

Así pues, las cuentas no cuadran en León y ¿por qué no cuadran? Si en todas partes del mundo la libertad ha traído el progreso ¿por qué en León no sucede lo mismo? Las cosas no pasan por que sí, las cosas no pasan por casualidad, todo tiene una lógica. Si estas cosas sólo pasan en la región leonesa es por que hay algo que impide el progreso, ese algo no es otro que la falta de libertad. Todas las regiones españolas han progresado mucho a pesar de los innumerables parásitos, sencillamente porque han gozado de libertad, han gozado de poder de decisión, algo que evidentemente León no ha tenido.

En esta Autonomía, mal llamada de Castilla y León, se están vulnerando los principios básicos de la democracia en la región leonesa. Por ejemplo: ¿tiene León el poder de decisión para administrar los principales recursos económicos existentes en la región, por ejemplo el agua y la electricidad?, ¿puede la región leonesa organizarse para que sus recursos agrícolas y ganaderos puedan crear riqueza en la propia región?, ¿puede la región leonesa utilizar sus recursos monetarios en generar riqueza en la región? Evidentemente no, no puede. Más bien ocurre lo contrario. Todos nuestros recursos económicos producen riqueza en otras partes. En ninguna otra región española ocurre lo mismo. Ese es el drama de León, ese es el único causante del retroceso de la región leonesa. Otros argumentos claros y evidentes: Valladolid nunca gozó de una libertad como la que ha tenido en los últimos años. Asimismo nunca Valladolid ha tenido un período de prosperidad tan grande en toda su historia como la conseguida en esos mismos años de libertad. Se puede afirmar que Valladolid es la provincia española que más ha progresado en esos mismos años. En cambio, León es la provincia española que más ha visto restringida su libertad en esos mismos años, depende en todo de Valladolid. Se puede certificar que León es la provincia española que más ha visto restringida su prosperidad entre todas las provincias españolas y es la provincia que más ha retrocedido en su desarrollo económico en toda su historia.

Esto no es opinión, son datos confirmados por el INE que demuestran que el Estatuto de Autonomía de Castilla y León sólo ha servido para saquear los recursos económicos y financieros de la provincia de León y de la región leonesa para enriquecer a una provincia llamada Valladolid. Esta Autonomía se ha caracterizado por tres razones: una, por dedicarse a saquear a León; otra por contribuir a debilitar a la sociedad leonesa hasta prácticamente anularla y hacerla desaparecer, y una tercera, por haber creado una nueva forma de dependencia absoluta de Valladolid, una dependencia que corta de raíz toda forma de libertad. Esta autonomía sólo ha producido frustración en la sociedad leonesa e innumerables parásitos, adictos a Valladolid.

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